En el Santuario Nacional Megantoni, se identificó una amenaza que puso en riesgo la presencia de esta especie en algunos ríos, sobre todo, por el uso de artes prohibidas como el uso de explosivos para la pesca, tramperas o redes de captura de gran tamaño, el uso de plantas venenosas como el barbasco y el kumo usados por las comunidades nativas y ahora de manera indiscriminada por colonos. Para contrarrestar estas amenazas se ha intensificado la presencia personal guardaparque en zonas identificadas con mayor presencia de pescadores, la sensibilización a la población mediante talleres de educación ambiental, difusión de la importancia de la conservación de la nutria en reuniones de trabajo con la población local.